jueves, 25 de febrero de 2016

El drama de ser albino en África

"Bajo la sombra del sol": El drama de ser albino en África


"Bajo la sombra del sol": El drama de ser albino en África
"Bajo la sombra del sol": El drama de ser albino en África
Casi 3.000 personas padecen albinismo en España, una enfermedad rara que les obliga a tener cuidados especiales con la piel y la vista, pero que no les impide una vida normal. Sin embargo, si hubieran nacido en África, sufrirían toda clase de prejuicios y su vida podría correr peligro.
Casa África y la Fundación por los Derechos Humanos 10.12.48 exhiben desde hoy en Las Palmas de Gran Canaria "Albino, bajo la sombra del sol", una exposición fotográfica que busca concienciar a los ciudadanos sobre el estigma que condena al ostracismo social y a la mendicidad a miles de personas en el continente vecino.
La exposición se basa en el reportaje fotográfico realizado en Senegal por Ana Yturralde entre 2007 y 2010 a raíz de un proyecto con la Asociación de Albinos de España y cuenta también con un documental cinematográfico de Luis Arellano que narra, a través de un caso real, el drama que padecieron los negros albinos hace unos años en Tanzania, donde sufrieron persecución y matanzas.
El presidente de la Fundación 10.12.48, cuyo nombre alude a la fecha de aprobación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, Raúl Celdá, ha explicado hoy que esta entidad y Casa África quieren sensibilizar a la población española sobre el alcance del problema que padecen las personas con albinismo en lugares como Tanzania, Senegal, Mali, Sierra Leona y otros países africanos.
Los albinos sufren en gran parte de África rechazo en sus comunidades de origen, se les margina, se les niega el trabajo y la educación y se les condena a la mendicidad, cuando no directamente se les mata, como ocurrió hace unos años en Tanzania, para comerciar con sus órganos en rituales de hechicería.
La Fundación 10.12.48 y Casa África quieren llevar esta exposición a diferentes lugares de España entre 2014 y 2015 para hacer visible este problema a través de las historias de sus protagonistas y recaudar fondos con los que financiar un proyecto que busca reforzar la escolarización de la población albina de Senegal, compuesta por unas 2.500 personas.
La fotógrafa valenciana Ana Yturralde llegó a esta comunidad senegalesa a través de la Asociación de Albinos de España, porque le pareció interesante reflejar cuáles son las consecuencias del mismo problema genético en un país occidental y en otro de África.
"Aquí (en España) todos los albinos tienen sus carreras, sus estudios y viven como cualquier persona normal: son enfermeras, profesores de universidad... y allí (en Senegal) arrastran problemas físicos, sufren cáncer de piel porque no tienen cremas de protección solar y son discriminados", relata Yturralde.